viernes, 16 de diciembre de 2011

El Eco del Isuela



            Ayer nos llegó el último número de El Eco del Isuela, el Boletín Informativo de la Asociación Cultural “Amigos de la villa de Calcena”. Como conocen muchos de nuestros lectores la revista se edita semestralmente y ha alcanzado ya sus veinte años de existencia.
            A lo largo de los 43 números aparecidos ha servido como nexo de unión con todas las personas nacidas en esa hermosa localidad que, por circunstancias de la vida, residen en otros lugares, sirviendo al mismo tiempo como órgano de expresión de las inquietudes culturales de un municipio que cuenta con un extraordinario patrimonio artístico.
            Entre los artículos que aparecen en este ejemplar nos ha llamado la atención el que firma Alberto Casañal sobre lo ocurrido en Calcena hace 100 años. En aquellos momentos, el escritor valenciano Vicente Blasco Ibáñez había fundado en Argentina dos colonias en las que quería asentar a emigrantes españoles. Los vecinos de Calcena, cuando conocieron el proyecto decidieron emigrar en masa, debido a sus precarias condiciones de vida en un municipio sin apenas comunicaciones y con muy pocos recursos. La noticia causó una gran alarma en las autoridades y sirvió de detonante para la puesta en marcha de algunas iniciativas encaminadas a mejorar la situación de la zona.
            Una de las curiosas repercusiones de este asunto fue la intervención de D. Severino Aznar, un personaje al que ya hemos hecho referencia en este blog. Incansable propagador de la Doctrina Social de la Iglesia y autor de numerosas obras y de iniciativas que tuvieron una gran repercusión, D. Severino, aunque nacido en Tierga, residió durante su infancia en Calcena y, por este motivo, terció en la polémica atacando duramente a Blasco Ibáñez, escritor de éxito y con proyección internacional, pero muy alejado de las posiciones ideológicas que defendía el ilustre catedrático de Sociología que no dudó en calificarlo de “revolucionario y novelista anticlerical”.
            Es imposible resumir aquí las diferentes facetas que ofreció este sorprendente proyecto de emigración en masa de los calcenarios. Por otra parte, el autor anuncia la continuación del trabajo en el próximo número. En cualquier caso, el tema es sumamente interesante y ofrece la posibilidad de un trabajo aún más detallado en torno a las causas que motivaron la crisis de la economía local y las inquietudes del vecindario.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario