lunes, 23 de abril de 2012

La ermita de San Jorge en Borja



            Hoy celebramos la fiesta del Santo Patrón de Aragón. En Borja, el M. I. Ayuntamiento ha programado una serie de actos, de los que informaremos mañana, que tendrán lugar en la ermita de San Jorge.
            No son muchas las ermitas dedicadas a este santo en Aragón y la de Borja reviste especial interés pues se remonta a época medieval, aunque ha sufrido diversas reformas a lo largo de su historia.




 
            Según la leyenda, en el montículo donde se levanta acamparon las tropas cristianas que reconquistaron la población. Esta hipótesis debe descartarse a luz de nuestros conocimientos actuales pues, entre otras razones, sabemos que la toma de Borja se produjo por capitulación con el último monarca hudí de la taifa zaragozana que se había refugiado aquí. En virtud de ese pacto se les permitió residir en sus casas, durante un cierto tiempo y sólo fue ocupado, inicialmente, el castillo. Jiménez Aperte y Escribano Sánchez sugirieron que dependía de una cofradía nobiliaria que, bajo la advocación de San Jorge, existió en nuestra ciudad. Estos días, Alberto Aguilera Hernández ha documentado que dicha cofradía seguía activa en agosto de 1609, cuando sus miembros fueron convocados para participar en la guerra contra Francia.




            En sus orígenes era un templo de planta rectangular con cubierta de madera soportada por arcos fajones y con un pórtico a sus pies con cuatro vanos apuntados, cuya traza aún se advierte en el interior de la ermita.




            En el siglo XIV, fue reformada, aunque su aspecto actual responde a la remodelación efectuada a comienzos del siglo XVI cuando se le dotó de una bóveda de crucería.




            En el exterior se puede apreciar el recrecimiento efectuado, pues quedan restos del primitivo alero.



            En el interior se mantiene un retablo barroco con el lienzo de su titular, aunque desaparecieron las columnas del mismo, tras el robo padecido hace unos años. Por otra parte, fue derribada la casa del ermitaño que estaba adosada a la fachada principal.




            En la actualidad, el entorno de la ermita ha sido adecentado y convertido en parque desde el que se pueden disfrutar de unas magníficas vistas del conjunto urbano.

No hay comentarios:

Publicar un comentario