Como en otros muchos lugares de nuestra
geografía, Borja celebra hoy la fiesta de Nuestra Señora del Carmen, bajo cuya
advocación se creo, en 1701, una cofradía que agrupaba a los sastres de la
ciudad. Dispuso de capilla propia en el claustro de la colegiata y, cada año,
organizaba los cultos habituales de este tipo de asociaciones religiosas:
Novena, misa por los difuntos de la cofradía, fiesta solemne este día y procesión
con la imagen por las calles de la población. Con este motivo la Virgen era
colocada, bajo un dosel, en el retablo mayor de Santa María, tal como puede
apreciarse en esta antigua postal que nos enviado dos lectores.
Afortunadamente,
la cofradía subsiste y ha sabido mantener todos estos actos, con las lógicas
limitaciones que los tiempos imponen.
Pero,
por otra parte, la devoción a la Virgen del Carmen cobró nueva fuerza, a partir
de 1952, cuando un grupo de entusiastas encabezado por Jesús Custardoy, Antonio
Andía y Lorenzo Corellano, propiciaron que se diera su nombre a uno de los
barrios más populares de Borja.
Desde
entonces, la Comisión de Fiestas del mismo viene organizando numerosos actos,
con la ayuda del M. I. Ayuntamiento, de los que ya informamos hace unos días.
Cada año, la Virgen es colocada en la plaza de ese barrio al que da nombre,
navegando sobre un velero, en clara alusión a su condición de Patrona de las
gentes de la mar, a la que todos los que han navegado se encomiendan en los
momentos de peligro y a la que suplican con los versos de Alberti:
Virgen del Carmen! Cuando la escollera
parta la frente en dos de mi navío.
Y
como homenaje a la Virgen, patrona de la
Armada y de todas las gentes de la mar, insertamos este enlace con un video de
la Salve Marinera, teniendo como fondo algunos de nuestros buques:
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