Magallón
es una de las localidades de la zona que ha conservado un interesante conjunto
de edificaciones civiles de los siglos XVI al XVIII. Lamentablemente, en los
últimos años, algunos de ellos han sido objeto de agresiones que han supuesto
su desaparición o han sido rehabilitados de forma inadecuada. Continuando con
la serie de artículos que venimos dedicando a esta localidad, hoy haremos referencia
a los más destacados testimonios que se han conservado de la arquitectura civil
del siglo XVI, continuando en otros artículos con ejemplos posteriores.
Entre
las muestras de la arquitectura civil del siglo XVI, uno de los edificios más
interesantes era este gran palacio que se extendía entre la calle de los Giles y la calle de Goya.
En la fachada de la calle de los Giles se advertía la antigua puerta en arco de
medio punto y, junto a ella, la piedra armera de la familia. Rematándola, la
característica galería con arcos de medio punto.
El
palacio fue derribado y rehecho con nuevos materiales. La piedra armera fue
colocada en la fachada de la calle Goya.
Otro
edificio interesante es el de la antigua
Casa Consistorial con su espléndida galería de ocho arcos de medio punto
doblados y un alero muy bien resuelto en ladrillo que se remata con un
campanil.
Se
encuentra en la calle de la Villa y ha dejado de cumplir su cometido original
ya que el ayuntamiento se trasladó provisionalmente al convento de dominicos,
instalándose posteriormente en su nueva sede de la plaza de España.
Pero,
sin lugar a dudas, uno de los edificios mejor conservados de esta época es la
casa de la calle de los Giles 10. Es
de planta cuadrada, todo él de ladrillo, con una faja de esquinillas que separa
la planta noble de la segunda.
En
la parte superior, tiene una galería de arcos doblados que discurre por las dos
fachadas de la casa, cinco a un lado y tres al otro. Son arcos doblados de medio
punto con antepechos macizos y se remata con un alero de ladrillos
aplantillados. Recientemente ha sido objeto de obras de adecentamiento que han
mejorado su aspecto.
Magallón, al igual que
ocurrió en Borja, gozó de una gran prosperidad económica durante el siglo XVI y
los primeros años del XVII. Un reflejo de esta situación lo constituyen los
numerosos ejemplos de edificios levantados en esa época, algunos de los cuales
han llegado hasta nuestros días, aunque en muchos casos su estado de
conservación dista mucho de ser el adecuado para la importancia de estos
testimonios, sobre todo teniendo en cuenta que se han derribado algunos de
ellos y otros se encuentran en grave riesgo de desaparecer.
Queremos,
por ello, ofrecer una muestra de los que, todavía subsisten con la esperanza de
que, en algún momento, se adopten las medidas necesarias para garantizar su
supervivencia. Uno de ellos es el situado en la calle de Goya nº 16, en el que, a pesar de su deterioro, mantiene
sus características fundamentales con su arquería superior, de vanos doblados y
de reducido tamaño. Aún se advierte el arco de medio punto que albergaba la
portada original.
De
características similares es este otro edificio
de la calle Ramón y Cajal nº 2. Su galería superior es más esbelta.
Conserva el ladrillo visto en las dos plantas superiores, mientras que la
inferior está revocada y pintada.
En la calle San Miguel nº 23-25 se encuentra otro de considerable
dimensiones, aunque muy alterado al haberse encalado las plantas superiores y
modificado sensiblemente la inferior.
Finalmente, debemos
reseñar la fachada posterior del que se encuentra ubicado entre la calle de Santa María y la plaza de España,
formando ángulo con la actual Casa Consistorial.
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